Mientras cae nieve en todo el hemisferio norte, se cuecen las grandes ciudades subtropicales y del hemisferio sur, destaca miembro de la Red Mexicana de Investigación a Largo Plazo
Guadalajara.-Las nevadas que vistieron al norte de Jalisco y a buena parte del país en días pasados, fruto de un invierno inesperadamente frío, confirman el fenómeno del cambio climático, advierte el investigador de la Red Mexicana de Investigación Ecológica a Largo Plazo, Enrique Jardel Peláez.
“Aseverar que está ocurriendo un calentamiento global cuando en Europa y Norteamérica se está pasando por un crudo invierno, con grandes nevadas y bajas temperaturas es sin duda contradictorio y contra intuitivo: ¿si hay calentamiento global por qué hace tanto frío? Esta pregunta se la hace ahora mucha gente y refleja que el fenómeno no está claramente entendido”, advierte el científico, miembro del Instituto Manantlán de Ecología y Conservación de la Biodiversidad (Imecbio) de la UdeG.
“El calentamiento global se refiere a un aumento de las temperaturas promedio a escala del planeta, demostrado por numerosos estudios que indican que, en promedio, las temperaturas de superficie y de los océanos han aumentado en los últimos 150 años y que esto está correlacionado con el incremento en las emisiones antropogénicas de gases con efecto de invernadero (GEI). Se han registrado también otros cambios relacionados, como la retirada de los glaciares, el derretimiento de capas de hielo en los polos y el aumento del nivel del mar”, subraya.
La ciencia ha acreditado los mecanismos del calentamiento: “el aumento de las concentraciones de gases como el bióxido de carbono, metano y otros GEI -esto es, el cambio en la composición de gases de la atmósfera- modifica las propiedades físicas de retención de calor de la atmósfera -esto es, aumenta el efecto de invernadero”.
Así, “lo que predice la teoría es que esto tiene consecuencias en la alteración del clima a escala planetaria; esto quiere decir que nos enfrentamos a la modificación no solo de la temperatura, sino del patrón de lluvias, la circulación del aire y las corrientes oceánicas y la incidencia de fenómenos extremos -sequías y ondas de calor pero también huracanes, lluvias torrenciales e inundaciones, heladas y nevadas-. Estamos hablando no solo de ‘calentamiento’ sino de cambio climático global”, enfatiza.
De manera que se trata de un fenómeno “de alteración del sistema del clima del planeta, que es un sistema complejo cuyo funcionamiento no está claramente entendido, pero lo que se sabe al respecto permite decir con certeza que existen riesgos y que lo más razonable sería aplicar el principio de precaución. Esto quiere decir que más vale no jugar con el clima y que, frente a las evidencias […] sería mejor buscar alternativas viables para reducir emisiones de GEI y conservar o restaurar la capacidad de los ecosistemas para retener carbono”.
En consecuencia, es una falsa conclusión decir que el crudo invierno “contradice las predicciones del calentamiento global”. De hecho, mientras eso pasa en la región boreal, al sur sucede lo contrario.
“Por ejemplo, en el caso de México, mientras que en Durango o Chihuahua se registran temperaturas extremas bajo cero y caen nevadas en el Ajusco o el Nevado de Colima, en la costa del Pacífico, en Acapulco o en Tapachula se registran temperaturas muy cálidas, de alrededor de 30 grados centígrados. En la porción este del océano Pacífico, cerca del Ecuador, la temperatura de superficie está ahora tres grados arriba del promedio (estamos pasando por un evento de El Niño). Hay que recordar que ahora es el verano en el hemisferio sur y que allí se registran altas temperaturas 20-27 grados en Buenos Aires, 17-31 grados en Santiago de Chile, 19-32 grados en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, 22-32 grados en Perth, Australia”. Todo eso, el martes 12 de enero de 2010.
Agustín del Castillo
http://www.milenio.com/node/366004
martes, 2 de febrero de 2010
Temperaturas extremas confirman el cambio climático
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario