viernes, 12 de junio de 2009

El cambio climático provocará una ola migratoria mundial en las próximas décadas, según un estudio de la Universidad de Columbia

BONN, 10 Jun. (REUTERS/EP) -

El cambio climático provocará una ola migratoria mundial en las próximas décadas, que forzará a millones de personas a dejar sus casas debido al aumento del nivel de los mares y océanos, según se desprende de un estudio conjunto de las universidades estadounidenses de Columbia y Nueva York y de la confederación por la ayuda humanitaria CARE Internacional, hecho público hoy en Bonn (Alemania).

Así, el informe destaca la necesidad de que la Comunidad Internacional reúna los fondos necesarios "para ayudar a que estas masas de gente sean capaces de escapar de los desastres naturales que se les avecinan y que amenazan la estabilidad política mundial". En este sentido, asegura que la inducción forzosa a la emigración y al desplazamiento se convertirá en un fenómeno "sin precendentes", en términos de alcance.

En esta línea, señala que aunque es demasiado pronto para pronosticar una cifra aproximada de migraciones, dado que las investigaciones sobre el fenómeno son "demasiado recientes", la Organización Internacional de Migración (IOM, por sus siglas en Inglés) estima que, de aquí al 2050, más de 200 millones de personas en todo el mundo, se habrán visto obligadas a abandonar sus hogares, en busca de seguridad.

Por otra parte, del trabajo recoge que las algunas de las zonas "especialmente vulnerables" serán islas como Tuvalu (Polinesia) y las Maldivas; áreas secas como la región africana de Sahel y México y los lugares poblados cercanos a los deltas de Bangladesh, Vietnam y Egipto.

"En las zonas de mayor población próximas a los deltas del Ganges, Mekong y el Nilo un incremento de un metro en el nivel del mar podría afectar a 23,5 millones de personas y reducir el terreno destinado a la agricultura intensiva en 1,5 millones de hectáreas, como mínimo", apunta el informe.

NUEVOS FONDOS PARA LA SEGURIDAD

En esta línea, demanda que los fondos necesarios para que las comunidades más pobres resistan al calentamiento global deben ser "nuevos y complementarios" a los de la ayuda oficial al desarrollo. Así, explica que las inversiones en regadío permitirían que los granjeros sean menos dependientes de las lluvias y también aconseja educarles en nuevos métodos de cultivo.

Finalmente, el informe exige el reconocimiento de los nuevos derechos hacia los futuros emigrantes que generarán las variaciones climáticas, ya que, hasta el momento, las personas que se desplazaban por bajas condiciones de vida "estaban consideradas como emigrantes económicos voluntarios y se les denegaba la protección especial que requerían".

No hay comentarios: