Denuncian torturas y desplazamiento forzoso en Perú

Lima (CRE - DPA).-

Unos 370 pobladores de dos distritos del departamento de Ayacucho tuvieron que dejar sus tierras debido a la ofensiva militar en la zona, que supuestamente incluye asesinatos, desapariciones y torturas, informó hoy, jueves, el diario "La República".

La versión, que cita a oganizaciones locales de derechos humanos, dice que los afectados acusan al Ejército de "quemar y saquear sus viviendas" y prohibirles regresar.

Asimismo, denuncia que 16 pobladores del distrito Llochegua, que junto con el de San Martín de Pagoa sufren las peores consecuencias, fueron sometidos a "maltratos físicos" tras ser detenidos a mediados de septiembre como supuestos colaboradores del grupo ultraizquierdista armado Sendero Luminoso.

A uno de los campesinos se le obligó a preparar una fosa para ser enterrado y una mujer fue violada, aunque después se la liberó, de acuerdo a la versión de "La República".

De otra parte, el diario "El Comercio" revela hoy que la Defensoría del Pueblo exigió investigar la muerte de cuatro campesinos en la zona de Vizcatán, en Ayacucho, 600 kilómetros al este de Lima, donde se han producido los mayores combates.

Las víctimas son integrantes de una misma familia, entre ellos una embarazada de seis meses, a los que las Fuerzas Armadas acusaban supuestamente de terroristas. Dos niños figuran como desaparecidos en las denuncias, pero el ministro de Defensa, Ántero Flores Aráoz, ha expresado dudas de su existencia.

El Ministerio de Defensa y El Ejército niegan los abusos y sostienen que las denuncias forman parte de una campaña senderista para desprestigiar la operación militar, la primera de gran envergadura que se lleva a cabo en los últimos años en el país.

Los militares iniciaron en agosto una ofensiva sin precedentes contra grupos armados en la zona conocida como VRAE (valle de los ríos Apurímac y Ene), que abarca territorios andinos y selváticos de los departamentos de Junín, Ayacucho y Cusco en los que operan remanentes de Sendero y bandas de narcotraficantes.

Gran parte de esas operaciones se concentran en Vizcatán, una zona andino-selvática con escasa población. Hasta el momento se han registrado once enfrentamientos entre militares y rebeldes que han dejado tres soldados y cinco senderistas muertos, además de 39 uniformados heridos, según la revista "Caretas" en su edición de hoy, jueves,.

Asimismo, 14 soldados fallecieron en una embocada en la localidad de Tayacaja, en el centroandino departamento de Huancavelica, ejecutada al parecer para quitar presión sobre sus huestes en VRAE.

Aunque algunos medios presentan los choques como un renacer de Sendero, grupo maoísta fundamentalista que según la Comisión de la Verdad dejó más de 40.000 muertos entre 1980 y 2000, los expertos en el tema dicen que se trata de una consecuencia natural del ingreso de militares a una zona que les estaba prácticamente vedada.

Por: Fernanda Ramirez
framirez@cre.com.ec

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