jueves, 8 de mayo de 2008

Las 10 preguntas más frecuentes sobre el aumento reciente de precios de los alimentos


¿Por qué están subiendo los precios de los alimentos?

Los precios de casi todos los productos alimentarios han aumentado mucho en los últimos dos años. Diversos factores han contribuido a este fenómeno: 1) un nivel bajo de las existencias mundiales (sobre todo del trigo y el maíz), debido a dos años de cosechas inferiores al promedio en Europa, en 2006 y 2007; 2) malas cosechas en importantes países productores, como Australia, en 2006 y 2007; 3) el acelerado crecimiento, con apoyo de subvenciones, de la demanda de producción de cereales para elaborar biocombustibles; (5) el fuerte crecimiento económico de algunos países en desarrollo y el crecimiento demográfico mundial. Además, los mercados agrícolas cada vez están más entrelazados con los mercados no agrícolas (energía, industria, finanzas, etc.). El cambio climático y las limitaciones de recursos (en particular el suministro de agua) también influyen en la oferta y la demanda general de alimentos.


2. ¿Se ha producido algún cambio estructural en el mercado?

Después de varios decenios de disminución, los precios de los productos agrícolas (en cifras reales, es relativo a la inflación general de los precios) muestran una tendencia ascendente. La diferencia entre el estado actual de los mercados agrícolas respecto a otras situaciones anteriores es que la carrera de los precios está durando más y repercute casi en todos los principales productos alimentarios y de piensos, y no sólo en unos cuantos. Sin embargo, algunas de las fuerzas que están produciendo la situación actual del mercado podrían no durar mucho. Por ejemplo, aunque no se tiene certeza de la función de los biocombustibles como opción sostenible a los combustibles fósiles, es evidente que, en condiciones de competencia, si los precios de las materias primas agrícolas aumentaran más rápidamente que los precios de la energía, perderían competitividad en el mercado energético. De esta manera, todavía es prematuro concluir que se esté produciendo un cambio estructural.

3. ¿Cómo intervienen los biocombustibles?

Los biocombustibles tienden a asignar los recursos productivos (como la tierra, la mano de obra, el capital) a la producción de materias primas para elaborar combustibles, en vez de a los cultivos alimentarios. Los biocombustibles pueden reducir la disponibilidad de alimentos destinados a la nutrición, debido a que la demanda "efectiva" de cereales, azúcar o aceites, y otros productos alimentarios básicos como los piensos, para la producción de combustibles puede superar la de alimentos. Esta nueva demanda influye en los precios. Entre los principales productos alimentarios y forrajeros, la demanda adicional de maíz (materia prima para la obtención de etanol) y colza (materia prima para la obtención de biodiesel) es la que más ha repercutido en los precios. Por ejemplo, de casi 40 millones de toneladas de aumento del total de la utilización mundial de maíz en 2007, casi 30 millones de toneladas se destinaron exclusivamente a la producción de etanol. La mayor parte de esta expansión se verificó en los Estados Unidos, principal productor y exportador mundial de maíz. Esto también explica el agudo incremento de los precios internacionales del maíz observados desde principios de 2007. La intensidad de la reacción de los precios se relaciona asimismo con la velocidad (de dos a tres años principalmente) con que se ha materializado esta nueva demanda y su concentración en los Estados Unidos (más del 90%). En 2007, alrededor del 123% del total de la utilización mundial de maíz se destinó a la obtención de etanol en todo el mundo, en comparación con el 60% utilizado para la producción de piensos. En los Estados Unidos, el maíz utilizado para producir etanol representó alrededor de 30% del total de su utilización internacional.

4. ¿Qué papel desempeña el cambio climático?

El cambio climático siempre ha intervenido en forma decisiva en la agricultura. El clima puede impulsar la producción, pero también puede producir efectos destructivos. En 2007, los Estados Unidos obtuvo una cosecha sin precedentes de maíz, debido al aumento sustancial de la siembra y a condiciones muy favorables del clima durante el crecimiento de los cultivos. Australia es un importante exportador de cereales. Si bien los científicos señalan que el cambio climático obedece al calentamiento del planeta, no queda claro si ya se perciben sus efectos. Hasta ahora los agricultores han podido afrontar o adaptarse a diferentes crisis debidas al clima. Pero no se sabe si podrán afrontar cambios climáticos más persistentes que pudieran incrementar la frecuencia y la gravedad de fenómenos meteorológicos extremos.

5. 5. ¿Cómo influyen las "economías en ascenso"?

Las economías en ascenso, en particular China y la India, desempeñan una importante función en la demanda y la oferta mundial de productos agrícolas. Sin embargo, el alza reciente de los precios de los productos básicos no parece haberse originado en esos mercados nuevos. Por ejemplo, en la temporada en curso (2007-2008) ni China ni la India están participando significativamente como importadores de cereales en los mercados mundiales. En realidad, China sigue exportando maíz y la India importa un volumen relativamente reducido de trigo, especialmente en comparación con el total de su consumo. En virtud del aumento de los ingresos, se prevé que la alimentación en las economías en ascenso pase de los alimentos básicos feculentos hacia alimentos pecuarios (como la carne y los lácteos). Al mismo tiempo, una vigorosa urbanización acompaña muchas veces al crecimiento económico, la población se traslada de las zonas rurales a las ciudades, donde hay una demanda de mano de obra mayor. Además, las tierras rurales se convierten a usos no agrícolas (industrial, residencial, etc.). La evolución gradual de estos acontecimientos, sus repercusiones en los mercados y los precios mundiales, pueden no tener tanto peso como cuando los mercados afrontan escasez aguda de suministros; esto puede permitir que los agricultores adopten tecnologías agrícolas que pueden reducir o anular los efectos del aumento de la demanda en los precios.

6. ¿Se está invirtiendo la prolongada disminución de los precios reales de los productos agrícolas?

Tras varios decenios de excedentes y precios bajos, los precios internacionales de casi todos los productos agrícolas parecen haber subido o incluso registrar niveles sin precedentes. Los precios altos podrían quedarse durante varios años. Con todo, es importante ponerlos en perspectiva. En cifras reales, los precios actuales de los productos son parecidos a las alzas experimentadas durante la crisis asiática de mediados del decenio de 1990, y son mucho más bajos que los niveles observados en el decenio de 1970. Las cuantiosas subvenciones otorgadas por los países de la OCDE a la agricultura son la razón principal de que los precios mundiales se hayan mantenido bajos. Al apartarse de esas políticas, además de las limitaciones de los recursos –como la escasez de agua y la difusión más lenta de las tecnologías existentes y novedosas- podrían limitar el crecimiento del suministro de alimentos, mientras sigue aumentando la demanda mundial. En este panorama parece poco probable que los precios de los productos alimentarios regresen al nivel bajo de los dos decenios anteriores.

7. 7. ¿Qué efectos tienen los elevados precios mundiales de los alimentos? ¿Quién se beneficia y quién pierde?

El costo mundial de los productos alimentarios importados ha aumentado por lo menos el 20% desde 2006, y presenta el nivel más alto del que se tenga registro. Es evidente que cuando aumentan los precios de los alimentos, los consumidores son las primeras víctimas. En especial en los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos, el aumento de los precios de los alimentos se traduce en cuantiosos incrementos de las facturas de las importaciones de alimentos, con repercusiones negativas en la balanza de pagos. Durante varios años, los consumidores de todo el mundo se han beneficiado de precios bajos de los alimentos. En muchos países, los agricultores sólo podían producir gracias al apoyo del gobierno. Casi ningún país en desarrollo podría ofrecer esas medidas de apoyo. En consecuencia, la inversión en agricultura ha disminuido y muchos de los países más pobres dependen cada vez más de las importaciones para satisfacer sus necesidades internas de alimentos. Si los altos precios de hoy realmente llegaran a la agricultura en los países en desarrollo, podrían repercutir muy positivamente en la producción de alimentos y transformar la agricultura en motor del crecimiento y el empleo, sobre todo en las zonas rurales.

8. ¿Cuáles son las perspectivas de corto a mediano plazo de los precios?

La FAO considera que las condiciones actuales del mercado son preocupantes porque los suministros mundiales de alimentos presentan un nivel críticamente bajo y la balanza mundial de alimentos está muy justa. Es probable que los precios altos impulsen la siembra de diversos cultivos en 2008 y, si el clima es favorable, podría estimular la producción y hacer que los precios bajaran más adelante. Sin embargo, como es poco probable que a corto plazo se amplíe la superficie agrícola en forma sustantiva, todo aumento de la producción de un cultivo será en detrimento de otro. De esta manera, aunque podrían disminuir los precios de algunos productos, los precios de otros todavía pueden aumentar. Es difícil hacer pronósticos precisos de corto plazo sobre los precios porque los mercados mundiales de alimentos están estrechamente conectados con otros mercados, como el de la energía y los mercados financieros. Un estudio conjunto FAO/OCDE de plazo medio sobre los principales productos agrícolas, publicado en julio de 2007, prevé que los precios del período 2007-2016 serán más elevados que los del decenio de 1990.

9. ¿Cómo están respondiendo los gobiernos?

Muchos países han reaccionado con medidas normativas ante el alza de los precios internacionales, principalmente para evitar agudos aumentos de los precios en los mercados domésticos. En 2007, numerosos países importadores redujeron o suspendieron sus limitaciones a las importaciones, y muchos países exportadores han limitado sus exportaciones, por temor a que si son muy abundantes se produzca escasez interna y, en consecuencia, suban los precios en el país. Algunos países han puesto existencias en el mercado para estabilizar los precios. Los países con potencial para ampliar su producción han subido los precios al productor, para fomentar la producción para la siguiente temporada. La FAO proporciona información sobre estas iniciativas normativas importantes y otros acontecimientos del mercado, a través de la publicación periódica de estudios e informes, en particular Perspectivas alimentarias , Perspectivas de cosechas y situación alimentaria , y Seguimiento del mercado del arroz.

10. ¿Cuál es la reacción de la FAO?

La FAO supervisa constantemente los mercados mundiales por medio de su Sistema mundial de información y alerta (SMIA). Publica información actualizada de la situación alimentaria mundial y avisa precozmente cuando van a producirse crisis de alimentos en los países más afectados. El SMIA de la FAO y el Programa Mundial de Alimentos además realizan evaluaciones conjuntas en los países que afrontan emergencias de alimentos, y dan información tempestiva a los gobiernos, los donantes y las organizaciones no gubernamentales. La FAO asimismo participa en la formulación de la Iniciativa sobre el aumento acelerado de los precios (IAAP), que atenderá a los agricultores vulnerables de algunos países mejorando su acceso a los insumos, como las semillas y los fertilizantes, además de contribuir a la aplicación de prácticas mejores de producción. Está preparándose la ejecución de la IAAP en algunos países antes de la temporada de siembra de mayo. También serán elementos importantes de la Iniciativa otras medidas, como la elaboración de recomendaciones para las políticas en apoyo a los gobiernos que afrontan un gran aumento de los precios de los alimentos.

www.fao.org

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