Los sírfidos, un grupo de insectos "muy parecidos a las avispas pero que son moscas", podrían utilizarse "como indicadores del medio ambiente y del cambio climático", ha explicado el científico Antonio Ricarte. EFE La investigación "El papel de los sírfidos (Diptera: Syrphidae) de los ecosistemas mediterráneos" de Ricarte se presenta hoy dentro del ciclo "Las semillas de la investigación. Los investigadores que pasaron por el doctorado del CIBIO" (Centro Iberoamericano de la Biodiversidad, con sede en la Universidad de Alicante).
"Los sírfidos son una familia de insectos distribuidos por todo el planeta, en una gran cantidad de hábitats y nichos ecológicos", ha comentado el experto, que ha apostado por su uso como bioindicadores porque tienen una "potencialidad muy grande" para reflejar alguna propiedad o característica del medio natural.
En este sentido, los sírfidos "sí que podrían inferir el efecto que el cambio climático tiene en los ecosistemas", ha señalado.
"Existen especies de éstos insectos que sólo se desarrollan en oquedades de árboles llenas de agua", ha puesto como ejemplo Ricarte, quien ha añadido que "esta especie de sírfidos depende de unos ecosistemas muy concretos que se podrían desecar si en algún momento suben las temperaturas a causa del cambio climático".
Por tanto, "la ausencia de éstos nos está indicando algo", ha explicado el investigador, para quien el estudio de la presencia de estos insectos en un determinado lugar "puede decir si está bien conservado" o, por el contrario, "hay alguna parte dañada e indica un sistema de conservación inferior".
"La importancia de los sírfidos reside en tres funciones biológicamente relevantes", ha explicado Ricarte, quien ha detallado que "son uno de los grupos más importantes de insectos polinizadores", cuya presencia en determinadas islas de la costa valenciana es vital para la permanencia de algunas plantas.
Asimismo, podrían usarse para el control de las denominadas "malas hierbas", ya que las larvas de ciertas especies se alimentan de los bulbos y tubérculos de algunas especies vegetales pero que en ocasiones, como ocurre con los narcisos, pueden ocasionar "pérdidas económicas".
No obstante, Ricarte ha apuntado la existencia de ciertas larvas de éstos insectos que se alimentan de otros, como los pulgones, causantes de plagas en la agricultura, por lo que se está investigando el uso de sírfidos para el "control biológico de los pulgones".
El estudio sobre la biodiversidad de estos insectos, realizado por Ricarte dentro de su tesis doctoral dirigida por la profesora María Ángeles Marcos, ha constatado la existencia en el parque nacional de Cabañeros (Ciudad Real) de 109 especies diferentes de sírfidos, "muchas de ellas desconocidas en España, Europa y para la ciencia".
Los investigadores han realizado estudios de diferente tipo, "apoyados y financiados" por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM), consistentes en "descripciones de larvas" y "observaciones de campo y de interacciones entre sírfidos y plantas".
En este sentido, ha explicado el sistema de interacción que existe entre un determinado tipo de sírfido y la especie vegetal conocida como "cebolla albarrana", que acoge en su bulbo los huevos de los insectos, que cuando nacen se alimentan de él, para a continuación, una vez adultos, alimentarse de las flores de las plantas y polinizarlas al mismo tiempo.
Ricarte ha explicado que la investigación realizada en Cabañeros es la "primera aplicación seria" realizada en un ecosistema mediterráneo, que son los "grandes desconocidos de Europa" y en los que "hay mucho por hacer y prospectar".
http://www.laopiniondemalaga.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2009051900_17_260196__Ciencia-sirfidos-podrian-usarse-como-bioindicadores-cambio-climatico
miércoles, 20 de mayo de 2009
Los ´sírfidos´ podrían usarse como ´bioindicadores´ del cambio climático
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